... Sabemos que beber demasiado alcohol nos hace mal. Nos da resaca, nos hace sentir cansados y no le hace
ningún favor a nuestra apariencia.
Y eso es sólo si hablamos de la mañana siguiente.
A largo plazo, aumenta el riesgo de desarrollar una larga lista
de problemas de salud como cáncer de mama, cáncer oral, enfermedades del corazón, derrames cerebrales y cirrosis en el hígado.
Las investigaciones muestran que un alto consumo de alcohol también puede dañar nuestra salud mental, deteriorar las habilidades de la memoria y
reducir la fertilidad.
La relación directa
entre el alcohol y el hígado es
bien conocida. Pero ¿qué pasa con el impacto del alcohol en otros órganos?
Numerosos estudios del corazón indican que el consumo moderado de alcohol ayuda a protegernos
contra enfermedades del corazón al
aumentar el colesterol bueno y detener la formación de coágulos sanguíneos en las arterias.
Tóxico
Sin embargo, se ha visto que consumir más de tres bebidas tienen un efecto directo y perjudicial sobre el
corazón.
El consumo excesivo de alcohol, especialmente con el correr del
tiempo, puede provocar la hipertensión arterial, miocardiopatía alcohólica,
insuficiencia cardíaca congestiva
y accidentes cerebrovasculares.
La ingesta abusiva de alcohol también incorpora más grasa
en la circulación del cuerpo.
El vínculo entre el
alcohol y el cáncer está bien establecido, según la organización británica Cancer Research UK. Un estudio publicado
en la revista British Medical Journal estima que este año el consumo de alcohol causa al menos 13.000 casos de cáncer sólo en Reino Unido cada año, cerca de 9.000 casos en hombres y 4.000 en mujeres.
Los expertos en cáncer
dicen que por cada 10 gramos adicionales por día de alcohol, el riesgo de cáncer de mama se incrementa en aproximadamente 7.12%.
En lo que respecta al cáncer de colon, estudios anteriores muestran que aumentar la ingesta
de alcohol por semana en 100 gramos aumenta el riesgo de cáncer en un 19%.
Un informe reciente de la revista Immunology señala que el alcohol deteriora la capacidad del cuerpo para combatir
las infecciones virales.Y estudios sobre la fertilidad sugieren que incluso
beber poco hace que las mujeres sean menos propensas a concebir, mientras que
el consumo excesivo en los hombres puede reducir la calidad y la cantidad del
esperma.
Por qué el alcohol
tiene este efecto negativo en tantos aspectos de nuestra salud podría deberse a acetaldehído: la sustancia que se produce en el cuerpo cuando el alcohol se
descompone.
El acetaldehído es tóxico y se ha demostrado que daña el ADN.
Su investigación indica
que una sola dosis alta de alcohol durante el embarazo puede ser suficiente
para causar daños permanentes en
el genoma de un bebé.El síndrome fetal del alcohol, dice, “puede hacer que nazcan niños con daños graves,
con la anomalías en la cabeza y la
cara y trastornos mentales”.
Dosis
El alcohol es un agente cancerígeno comprobado.
“Las células cancerígenas no
existen si no hay una alteración
en el ADN. Cuando bebemos, el acetaldehído corrompe el ADN de la vida y puede llevarnos por el camino d el cáncer.
“Uno de los defectos genéticos más comunes en el
hombre es la incapacidad para contrarrestar la toxicidad del alcohol”.
“La toxicidad del alcohol es compleja, pero sí sabemos que tiene una relación directa con la dosis”.
En lo que se refiere a la enfermedad hepática alcohólica, cuanto
mayor es el consumo de alcohol por semana mayor es el daño al hígado, y esto
aumenta de forma exponencial en las personas que beban de seis a ocho botellas
de vino más en ese período, por ejemplo.
En los últimos 20 a 30
años, dice el doctor Sheron, las
muertes por enfermedades del hígado
se han incrementado en un 500%, y un 85% de ellas fueron debidas al alcohol.
Sólo en los últimos años el aumento de desaceleró.
“El alcohol tiene un mayor impacto que el
tabaquismo en la salud porque el alcohol mata a una edad más joven. La edad promedio de muerte para una persona con enfermedad
hepática alcohólica es de 40 años”.
“Más dañino que la heroína o el crack”
El alcohol es, sin duda, un problema de salud pública también.
A principios de este año, el
NHS, señalaron que los ingresos
hospitalarios relacionados con el alcohol alcanzaron niveles récord en 2010. Más de un millón de
personas fueron ingresadas en el año 2009-10, en comparación con 945.500 en 2008-09 y 510.800 en 2002-03. Casi dos de cada tres
de esos casos eran hombres.
Al mismo tiempo, la organización Alcohol Concern predijo que el número de ingresos llegaría al millón y medio en
2015, y que le costarían al NHS
unos (US$5.700 millones al año.
El año pasado, un en la
prestigiosa revista The Lancet concluyó que el alcohol es más
dañino que la heroína o el crack si se consideran los peligros en
general para el individuo y la sociedad.
El estudio, realizado por el Comité Científico
Independiente sobre Drogas, también
señaló que el alcohol es tres veces más dañino que la cocaína o el tabaco, debido a que es tan
ampliamente consumido.
Entonces, ¿cuánto alcohol es
demasiado?
Las directrices que se están
revisando actualmente, dicen que las mujeres no deben beber más de dos a tres unidades de alcohol por día y el hombre de tres a cuatro unidades al día.
Sin embargo, médico de cabecera y principal asesor médico de la asociación
Drinkaware, dice que la gente no sabe el contenido de alcohol de un vaso de
vino.
“La mayoría no se dan cuenta de lo que está bebiendo y pueden deslizarse muy fácilmente más allá de los límites aceptables”.
La jefa de investigación en el Instituto de Estudios sobre el Alcohol, dice que las
directrices actuales y la forma en la que se comunican pueden darle al público información engañosa.
Tenemos que tener mucho cuidado al sugerir que
existe un nivel “seguro” de in-gesta de alcohol. De hecho, tenemos que
explicar que hay riesgos asociados con el consumo de alcohol, y que mientras
menos se bebe menor es el riesgo de desarrollar problemas de salud.
Wallace quiere que el gobierno mida los niveles máximos tolerables de alcohol en unidades por
semana, en lugar de por día: no más de 21 unidades a la semana para los hombres
y 14 unidades para las mujeres.
“A la gente le gusta tomar una copa, pero tienen que
aceptar que hay una relación riesgo-beneficio”.
Fuente: el-nacional.com